Todos hemos oído hablar de Mowgli, el personaje principal de El libro de la selva, o Tarzán, ser de Tarzán: rey de los monos. Estos personajes son ilustres porque no solo demuestran la adversidad humana para sobrevivir en cualquier ambiente, entre lobos, panteras y osos en el primer caso, y entre gorilas en el segundo. La adaptabilidad humana es sorprendente, no solo dentro de la imaginación humana sino también en vida real con casos como el de Rómulo y Remo, los famosos fundadores de la antigua Roma, quienes fueron amamantados por una loba.
Pero lo más sorprendente de estos casos es la habilidad que han tenido estos personajes, tanto existentes como ficticios, es su capacidad para adaptarse a un lenguaje que, más allá de ir de un lenguaje hablado, pasaban a un lenguaje primitivo basado en gruñidos, aullidos, y señas corporales. El lenguaje feral es un tema del cual muy poco se sabe. Han habido a lo largo de la historia varios casos, de los cuales, al ser introducidos los protagonistas de semejantes crónicas a una sociedad humana, han encontrado una barrera que no los ha dejado comunicarse en nuestra lengua, manteniéndose encerrados, por falta de un mejor término, en un mundo lingüístico del cual, francamente, no sabemos casi nada.
La base de la comunicación siempre ha sido el contacto social. En especies de animales que catalogamos como carente de un lenguaje hablado, la habilidad del ser humano en condiciones extremas para aprender el lenguaje corporal de los animales es fascinante y un tema que da mucho que debatir y descubrir, sobre todo si tomamos en cuenta las corrientes de las filosofías epistemológica, de la mente y del lenguaje.
Pero hay dos problemas para poder investigar con mayor profundidad este tema:
i. Tendríamos que introducir a un infante a este supuesto escenario, el cual no puede ser controlado y el cual trae a la superficie varias cuestiones morales acerca del asunto.
ii. Al extraer al sujeto fuera de su nueva comunidad, nos va a ser muy difícil sacarle la información que deseamos saber.
Aún así, no deja de ser un tema interesante y que nos podría enseñar mucho más acerca de la complejidad del lenguaje.
Hay una diferencia sustancial entre los dos protagonistas principales. Mowcly fora parte de un lugar de manera horizonta mientras que tarzan es el rey. Son dos visiones distinats de relacionarse con su ambiente. Será el origen de los autores lo que determina esa característica de los personajes?
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